Buenas noches, no penséis que voy a hablar de sexo, eso lo
dejamos para otro día, ni de guapos o guapas, que será otro tema, voy a hablar
de comida, pero de comida de la buena.
Llegan una fechas en las que comemos más con los ojos que
con la boca, esto nos pasa casi siempre, hoy me decía una amigo: “cuando vayas
a compra, come antes, porque si no compraras todo, por el hambre que tienes y
tus ojos miraran hacia todos los lados y lo comparas todo” y lleva razón, si tú
has comido bien y no tienes hambre, pues entras a comprar y te limitas a lo que
sabes que necesitas, bueno a lo mejor se cuela algún capricho, pero por lo general
no suele ser así, aunque para que no se cuele nada de la lista, mi pareja es
perfecta, compra según lo tiene escrito, es decir que si va a un super y tiene
apuntado leche, limpiacristales y huevos, va al pasillo de la leche, se va a
por el limpiacristales y vuelve al pasillo anterior a por los huevos, así no
mira más cosas por si de repente se le ocurre que puede necesitar mantequilla,
no él solo compra la lista que tiene. O bueno peor es el hermano de una amiga,
que mira lo que tiene en los armarios y compra lo mismo, si tiene jabón de
manos, trae más jabón de manos pero no detergente porque como no lo ha visto,
no sabe cuál es el que tiene que tener.
Pero hoy no quería hablar de listas de la compra, quería hablar
de lo que comemos con los ojos, si vas a un restaurante y pides un menú del día,
por ejemplo yo el otro día fui a comer al de un amigo que se come
estupendamente y además es comida casera de verdad, y de primero me comí unas
lentejas, espectaculares, pero en mi casa me como esas lentejas y el postre, no
como un segundo plato, pero claro como comí
con los ojos me pedí el segundo plato, albóndigas caseras en salsa con
patatas fritas…. Vamos que como con las lentejas, si yo me como eso en mi casa
es plato único, y venían 5 albóndigas… que en un principio uno piensa que
pueden ser pocas, pero a la segunda y después del primer plato te digo que tu
estomago esta mas que lleno, vamos no llegue ni al postre que ponían un flan
con nata de los buenos… y con los ojos hubiese buscado un hueco, pero era
imposible, ahora entiendo porque los romanos vomitaban para seguir comiendo y
bebiendo, porque cuando delante de la vista tienes un montón de manjares a los
que le darías un bocado solo por probarlo, escuchas a la parte de tu cerebro que
te dice- mira que pinta…mmmmmm que rico tiene que estar….- cuando entras en una
pastelería, ¿no te comerías todo lo que tienen expuesto? Uno de cada, para no
engordar…. Pero uno de cada, no dejabas ni las miguitas, y tu estomago te está
diciendo, para, no comas más que no entra, ni aunque te desabroches otro botón…
En fin, que como os decía al principio llegan unas fechas en
las que todo lo que vemos es apetecible, y es más difícil decir al ojo que no, que al estómago,
os voy a poner un mensaje en cadena de los que se envían ahora por wasap que
describe esto que os acabo de contar:
COMUNICADO:
Por medio del presente, se les
informa que a partir del día de hoy, estaremos ausentes tomando un muy merecido
descanso, para regresar con ustedes el 7 de enero de 2014. Les deseamos felices
fiestas, deseando para ustedes y sus familias lo mejor para el próximo año
2014!!!
Atentamente: La lechuga, el pan
integral, la verdura, la fruta, la leche desnatada, el pescado, el pepino, el
apio, la col, el yogurt…
PD: en nuestra ausencia, los atenderán
con el mismo gusto de siempre…. El solomillo, los langostinos, el pan francés,
la mantequilla, las salsas, el pavo, la pierna de cordero, el puré, las
galletitas, los turrones, las trufas, los polvorones… y por supuesto uno que
otro traguito de vino, de cerveza, de anís del mono, de champagne, de licores
varios, de gin tonic…
Gracias por su atención, comienza
la operación a la mierda el bikini.
Os deseo un feliz puente, hasta el domingo por la noche, no volveré
por aquí… y ya que hemos empezado con las comidas navideñas y el encendido de
luces, os deseo una FELIZ NAVIDAD, y cuidado con lo que comemos…
La película de ayer, como la cosa era de robos, pues era
Tres mujeres y un plan. Hoy os dejo con esta de otra película que nos va
perfecto con lo que os he estado contando…
“Todo
lo que hay en esta sala es comestible,
incluso
yo, aunque eso sería canibalismo."
Que os vaya bonito.
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